La accesibilidad en ascensores juega un papel crucial en la sociedad moderna, garantizando la igualdad de oportunidades y mejorando la calidad de vida de las personas, especialmente de los adultos mayores y aquellos con discapacidades que enfrentan dificultades de movilidad.
Normativa entorno a la accesibilidad en ascensores
El derecho universal a la accesibilidad y la movilidad es esencial. La instalación de ascensores en edificios, comercios y otros espacios favorece la creación de ambientes inclusivos, eliminando barreras físicas que dificultan el acceso a diferentes áreas o niveles de un inmueble.
En este sentido, la legislación española es clara y regula la accesibilidad de ascensores a través de diferentes normativas, estableciendo todos los aspectos que deben cumplir los edificios nuevos y las reformas de los existentes, para asegurar que sean accesibles a todas las personas, sin importar su capacidad física.
La base se encuentra en el Código Técnico de la Edificación (CTE), donde se especifica que todos los edificios deben tener soluciones de movilidad vertical como, por ejemplo, ascensores, rampas o plataformas que fomenten la igualdad de acceso. Este mandato se refuerza en la Ley General de Derechos de las Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social, se estipula la instalación de ascensores adaptados para eliminar cualquier tipo de barrera arquitectónica que dificulte la movilidad de personas.
A su vez, la norma UNE-EN 81-70 explica los requisitos técnicos que garantizan que los ascensores sean accesibles y seguros para personas con discapacidad, mientras que la norma UNE-EN 81-20 y UNE-EN 81-50 contempla el diseño, la instalación y la seguridad de los ascensores, incluidas las nuevas instalaciones.
Por lo anteriormente mencionado, es importante destacar que las normativas vigentes tienen como finalidad que se adopten medidas para facilitar la movilidad de todas las personas y asegurar la accesibilidad en ascensores.
Medidas para garantizar la accesibilidad en ascensores
- Eliminación de barreras arquitectónicas: La accesibilidad comienza por eliminar las barreras que impiden a personas con movilidad reducida, como las que utilizan sillas de ruedas, acceder a los ascensores sin dificultad.
- Puertas automáticas y anchas: Los ascensores deben contar con puertas automáticas que se mantengan abiertas durante al menos 20 segundos y sean lo suficientemente anchas para permitir el acceso de personas en silla de ruedas, andaderas o carritos.
- Botoneras a baja altura: Los botones deben estar a una altura accesible, entre 90 y 120 cm del suelo, para que puedan ser alcanzados fácilmente por usuarios de pie o en silla de ruedas. Además, deben ser grandes, claros y bien iluminados para facilitar su uso.
- Indicadores visuales y sonoros: Los ascensores deben estar equipados con pantallas LED que muestren el número del piso y emitir anuncios audibles para informar sobre el piso y la dirección del ascensor (subiendo o bajando), asegurando accesibilidad para personas con discapacidad auditiva y visual.
- Plataformas elevadoras: En edificios donde no es posible instalar un ascensor convencional, las plataformas elevadoras son una solución accesible, facilitando el acceso a personas con movilidad reducida o que usan sillas de ruedas.
- Barandillas de seguridad: Las barandillas proporcionan apoyo adicional dentro del ascensor, ayudando a las personas con movilidad reducida a entrar y salir de manera segura y reduciendo el riesgo de caídas.
Accesibilidad en ascensores: ¿Qué opciones de movilidad vertical existen para eliminar barreras arquitectónicas?
En los casos donde no se puede garantizar la accesibilidad en ascensores a través de las opciones tradicionales, existen diferentes alternativas que se adaptan a las necesidades concretas de los usuarios y pueden ayudar a eliminar barreras arquitectónicas. Las principales son:
- Ascensores convencionales: Son la opción más versátil, permitiendo el acceso a diversos tipos de usuarios, independientemente de sus capacidades físicas.
- Homelift: Ascensores pequeños, ideales para viviendas unifamiliares. Son accesibles y prácticos, permitiendo una solución de movilidad vertical en los hogares.
- Sillas salvaescaleras: Perfectas para personas con movilidad reducida que deben subir o bajar escaleras. Se adaptan a la escalera y actúan como un sistema de transporte vertical.
- Plataformas salvaescaleras: Especialmente diseñadas para personas en silla de ruedas, estas plataformas permiten el acceso entre diferentes pisos sin necesidad de escaleras.
- Plataformas verticales: Son adecuadas para edificios de pocas plantas, permitiendo a los usuarios superar desniveles o escaleras.
- Rampas: Facilitan el acceso de personas con movilidad reducida, eliminando la necesidad de escaleras y permitiendo el ingreso a edificios y otras instalaciones.
- Bajada a cota 0: Consiste en que los accesos y entradas estén a nivel del suelo, eliminando las elevaciones que dificultan el paso.
Subvenciones para la accesibilidad en ascensores
La accesibilidad en ascensores es de suma importancia en España. Por eso, en el país los usuarios que necesitan hacer adaptaciones para garantizar el acceso y no cuentan con los recursos necesarios, pueden acceder a subvenciones y ayudas diseñadas para tal fin. Para saber en concreto a qué ayudas puedes optar, consulta a tus autoridades locales o autonómicas concretas, puesto que varían dependiendo del territorio.
Estos fondos están disponibles para personas con discapacidades, adultos mayores o aquellos que están en vulnerabilidad económica, permitiendo cubrir una parte de los costes asociados a la instalación de ascensores, plataformas elevadoras, rampas, entre otros dispositivos.
Aszende, un proveedor que te ayuda a cumplir con las normativas de accesibilidad en ascensores
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La accesibilidad en ascensores es un derecho fundamental que no solo mejora la calidad de vida de muchas personas, sino que también cumple con las normativas legales vigentes. Asegúrate de que tus instalaciones estén adaptadas a las necesidades de todos, y si necesitas asesoramiento, Aszende es el socio ideal para garantizar una solución accesible y conforme a la legislación.